Cómo nos ven otras comunidades

En esta ocasión Rubén Gómez Antolí, miembro de KDE España nos habla, del proyecto KDE y como ve a la comunidad de LibreOffice.

Él es un ingeniero técnico industrial en la rama de electrónica industrial (si, hay dos veces industrial) al que le ha gustado desde siempre la informática y otras cosas. Muy inquieto, siempre anda haciendo o pensando algo.

Vive en El Ejido, en la provincia de Almería, España, pero se suele mover por más sitios ya que su familia se encuentra dispersa por Murcia, Valencia y Ciudad Real.

¿Qué es el bien común?

Esa es una pequeña pregunta con una respuesta muy, muy grande, tan grande que hay libros y libros y charlas y charlas respondiéndola, y mucho mejor de lo que lo podría hacer yo.

Para mi el bien común es todo aquello, material o inmaterial, que beneficia a la sociedad en su conjunto, así como al planeta. No puede haber bien común si perjudica la salud del planeta.

El bien común es lo que tenemos que defender, porque es lo que nos sustenta como seres sociales y es lo que nos defiende frente a intereses espurios.

El bien común es defender la salud de un río, oponerse al abuso de grandes compañía sobre sus empleados, defender la libertad del software y la libertad
de la cultura.

En cualquier caso, y como digo, es una respuesta muy larga para contestarla en unas breves líneas.

¿Trabajas en una empresa vinculada con FLOSS o solo contribuyes en tu tiempo libre?

Soy trabajador autónomo y divido mi tiempo entre la empresa familiar, muy alejada del sector informático, y otras actividades como formación a chavalería entre 6, 7 años hasta 15 o 16, aunque otras veces he dado formación a adultos y formadores.

Mi contribución al software libre viene principalmente de mi tiempo libre, aunque tanto en la empresa como en mis otros trabajos como ingeniero utilizo software libre y, de forma puntual, colaboro mediante envío de informes de error o sugerencias de mejoras.

No obstante, si puedo dedico parte de mi tiempo laboral a ayudar a otros usuarios, asistir u organizar congresos y cualquier otra tarea. Creo que es importante ya que mi infraestructura informática está basada en software libre y, por lo tanto, para mi es importante devolver de alguna forma todo lo que recibo.

¿En qué áreas de los proyectos trabajas normalmente? ¿Te gustaría hacer algo más?

Me dedico a muchas cosas, como he dicho al principio soy muy inquieto. Trabajo principalmente en el área de comunicación y promoción, aunque desde hace 4 años estoy en la junta directiva de KDE España y dedico parte de mi tiempo a hacer gestiones que pueden ser tanto burocráticas como operativas. Por ejemplo hace cosa de dos años desde la junta estuvimos empujando para implantar unos objetivos a cumplir por KDE España.

También he dedicado tiempo a organizar congresos o eventos relacionados con el software libre, o con el mundo libre como a mi me gusta denominar a todo el
espectro de software, hardware y cultura libre.

A la pregunta de si me gustaría hacer algo más: eso siempre, desde profundizar en mis leves conocimientos de programación para poder aportar en aplicaciones o
sistemas que utilizo y me gustan, hasta traducir o redactar documentación (que también lo he hecho); pero el tiempo es finito y no siempre llega.

¿Cómo te involucraste con LibreOffice?

Desde el colectivo Hacklab Almería, al que también pertenezco, se organizó la LibOCon 2019. A partir de ahí he ido colaborando, poco para mi gusto, con
LibreOffice, principalmente a través de promoción en el podcast de KDE España y otros medios: algunas charlas que me invitaron a dar, por ejemplo.

Sabemos que participas hace bastante tiempo de la comunidad española de KDE. En este sentido, ¿cuáles son las diferencias y similitudes que ves entre el proyecto LibreOffice y el proyeto KDE?

¡Uf! Esa pregunta también es complicada de responder.

Creo que la diferencia principal entre los dos proyectos es que KDE se encuentra, principalmente, enfocado hacia sistemas operativos libres, es decir, GNU/Linux al 99% y, por lo tanto, aglutina más comunidad de personas con esa visión.

Sin embargo, LibreOffice no se encuentra tan enfocado en el sistema del pingüino y su comunidad es algo más heterogénea. Eso no quiere decir que no exista una preocupación verídica por el software libre, ni mucho menos, pero, si me lo permitís expresarlo así, existe cierta permisividad con el uso de otros sistemas.

KDE también tiene cosas para esos otros S.O. propietarios pero es mucho menos que LO y, en cierta forma, hay menos preocupación en ese sentido. Por supuesto
hay excepciones con aplicaciones como Krita, que es una de las superestrellas de KDE, y está supercuidada en todos los sistemas.

Por otro lado, y aunque no estoy totalmente involucrado en la comunidad de LO, mi sensación es que la comunidad KDE se encuentra algo mejor organizada, tanto
la internacional como en el caso concreto de KDE España.

En KDE España tenemos grupos de trabajo (comunicación, junta directiva, Akademy-ES, universidades…) mientras que no he visto nada de eso en LO donde me parece que todo está más difuminado y profesionalizado; es decir, creo que hay gente que recibe sueldo directo desde LO (no me refiero a trabajar para la fundación sino con un trabajo directamente relacionado con LO) y, por lo tanto, realiza su colaboración en su área de trabajo. También hay más empresas profesionales impulsando el desarrollo de LO que de KDE, que se sostiene básicamente de donaciones. De alguna forma podríamos decir que KDE es más comunidad mientras que LO es más empresa. Eso no es algo malo, ni mucho menos. En cualquier caso, los dos proyectos tienen comunidades fuertes y unidas, con una visión coherente con los objetivos de los proyectos y un apoyo sin fisuras al software libre.

Por añadir algo más, si me gustaría ver más puentes entre KDE y LO, como, por ejemplo, si existen entre KDE y Gnome, normal al ser proyectos con unos objetivos y fines muy similares, claro.

¿Cómo se está reorganizando la comunidad KDE luego de la pandemia?

No creo que la comunidad KDE se haya tenido que reorganizar tras la pandemia. De alguna forma lo que cambió y está regresando a la normalidad es la presencialidad.

Durante la pandemia y justo después hubo que parar de hacer encuentros físicos, ahora que estamos en una situación más normalizada estamos volviendo a eso.

Quizás lo que cambió fue el esfuerzo dedicado a realizar actividades de forma remota y, ahora, ese esfuerzo está volviendo a los eventos físicos que cuestan
un poco más de trabajo porque la gente se ha acostumbrado al remoto y, es cierto que es más cómodo porque te ofrece más flexibilidad y menos tiempo invertido en
viajar.

¿Cómo fue tu experiencia inicial al contribuir con LibreOffice?

Bastante buena, durante el congreso LibOCon me divertí bastante, me encontré de nuevo con algunos amigos como Gabriele Ponzo, que había conocido durante la
celebración de Akademy y Akademy-ES 2017; y aprendí bastante sobre la comunidad de LibreOffice.

Además hice amistades nuevas dentro de la comunidad LO. Es algo que recomiendo a todo el mundo, por supuesto, asistir y, si se puede, organizar un evento de este tipo.

Fueron días de mucho trabajo durante el congreso, y antes también, pero la sensación de estar devolviendo algo a un proyecto que tanto te ayuda en el día
a día, la sensación de estar trabajando en algo que también puedes considerar como algo tuyo, es realmente buena e inspiradora.

¿Qué es lo que más necesita LibreOffice en este momento?

Personalmente creo que necesita más difusión, más promoción y llegar más al público, tanto de la calle como el profesional. Creo que tenemos un buen conjunto de aplicaciones a un nivel similar o mejor que otras opciones mucho más conocidas pero no somos capaces de llegar al público.

Se necesita también mayor formación y formadores, sin lo segundo no puede llegar lo primero y, en mi trabajo, veo cosas que evidencian esta falta.

A nivel técnico se ha mejorado muchísimo en los últimos años y, dejando a un lado algunas carencias que si tienen otras aplicaciones, estamos muy bien para
la gran mayoría de personas.



Estoy muy agradecido por la entrevista y la oportunidad de compartir mis inquietudes con la comunidad de LO (creo que en KDE soy algo más conocido). Aprovecho para agradecer a toda la comunidad de LibreOffice el excelente conjunto de aplicaciones que nos han dado y, por supuesto, el trabajo de todos. Creo que LibreOffice tiene un gran futuro por delante y está en nuestras manos hacerlo realidad.

Muchas gracias por la atención recibida.